12.19.2010

Caso Preparatoria Godoy

Estimados Amigos,
Como recordarán el 12 de Mayo del 2010, servidores públicos del INDESALUD sacrificaron un perro in situ frente a estudiantes -menores de edad- de la Preparatoria Montejo Godoy. Esto derivó en que la Comisión Estatal de Derechos Humanos iniciara una investigación sin que hubiera una denuncia de por medio (lo que refuerza nuestra confianza en esta institución) y hace unos días emitió el siguiente oficio, que suponemos es una recomendación, dirigido al titular de la Secretaría de Salud Dr. Enrique Ivan González López.









5.11.2010

Caso Preparatoria Nazario Montejo Godoy

El día Viernes 8 de Mayo del presente recibimos una denuncia en video donde se observa a personal del Departamento de Vectores y Zoonosis, dependiente de la Secretaría de Salud, llevando a cabo lo que aparenta ser el sacrificio público de un perro en las instalaciones de la escuela Preparatoria "Dr. Nazario Víctor Montejo Godoy". Las imágenes contenidas en este documento, muestran a trabajadores del departamento en cuestión esperar mientras surte efecto una inyección que le han suministrado a un animal. Posteriormente, para verificar la ausencia de signos vitales uno de los trabajadores levanta el cuerpo, dejándolo caer contra el pavimento. Al “comprobar” que el perro no se mueve más, lo cargan del cuello por medio de un pasalazos y de las patas, escena que es presenciada en todo momento por los alumnos que gritan, lloran y protestan, obteniendo como respuesta las risas y burlas de estos servidores públicos.


Al margen de coincidir con que el problema de sobrepoblación canina está fuera de control y que los perros en vía pública son un importante factor de dispersión de enfermedades, nos produce una enorme extrañeza:
  1. La notoria falta de capacitación de estos empleados públicos al momento de interactuar con miembros de la comunidad, en este caso adolescentes.
  2. La notoria falta de capacitación para manejar al animal adecuadamente.
  3. La falta de protocolos y la nula sensibilidad del personal.
  4. Que estas acciones se hayan dado en horario hábil, en una escuela pública, de menores de edad.
  5. Que el personal no estuviera debidamente identificado.
Debido a lo anterior, consideramos imperativo que la Secretaría de Salud diseñe los protocolos o procedimientos que se utilizan para llevar a cabo estas acciones y que los exterminios se realicen posteriormente a una jornada de sensibilización de la comunidad involucrada. Así mismo basados en la experiencia con que contamos sugerimos, además de la capacitación urgente del personal, que se les brinde apoyo psicológico, pues está comprobado que este tipo de trabajo produce depresión, ansiedad, tensión y termina por afectar la relación del individuo con su comunidad y su familia.